miércoles, 17 de agosto de 2022

Llueve

No siento que pueda. Nunca me he sentido capaz de vivir por mí misma lo cual es un gran problema. Hay días que agradezco y otros en los que maldigo a la persona que no me dejó morir. Siempre he dicho que la tercera es la vencida, pero honestamente ya van más de tres veces y sigo aquí. ¿Cómo le hace la gente para aferrarse la vida? ¿Para qué querer vivir? ¿Para ver sonreír a las personas que amas? ¿Para comprar cosas? ¿Para visitar lugares que no sabías que existían? Lo sé, pero ¿por qué mis deseos de muerte siempre se sobreponen y los superan?


Los días pasan frente a mí desde el 2016 y no los puedo palpar. No los puedo sentir, no los puedo disfrutar. Todo está ahí, todos están ahí, ¿dónde estoy yo? ¿Dónde quedó V? ¿Por qué la abandoné a su suerte? ¿Algún día la volveré a ver? Tal vez siga acostada en el hospital, esperando a sus papás.

Ha sido difícil aunque a simple vista no se perciba. Acallar las voces internas no es fácil, levantarte cada día con abucheos y reclamos es una mierda, pero no los puedo culpar porque si yo estuviese dentro, viéndonos haría lo mismo. Tal vez si pudiera regresar el tiempo... no se puede regresar el tiempo. Tolkien a través de Frodo pudo describir lo que yo no pude transmitir en mi libro:

"How do you go on, when in your heart you begin to understand... there is no going back? There are some things that time cannot mend. Some hurts that go too deep."

Es porque soy inútil y porque la única tarea que tenía la dejé de lado. Pérdoname, Iori. Tal vez no debiste confiar en mí. Tal vez tu historia muera conmigo y sea olvidada. Lo lamento mucho. He tenido tiempo, pero soy incapaz de escribir. Soy idiota.

No veo a la muerte como algo malo. La gente se aferra a sus recuerdos, es eso. Nada me haría más feliz que ser sólo un recuerdo, una persona a la que anhelas ver, pero nunca más la encontrarás en este mundo, como Yohan, aunque probablemente perdería mi conciencia como para saberlo. Lamento que la muerte sea una onda que afecta a otras. No puedo hacerle esto a mi madre. Tal vez sólo sea mi destino vivir sin sentir la vida, vivir sin sentir de verdad, vivir sin volver a amar, sonreír para convencerme de que todo está bien y que mañana volverá a amanecer, aunque sepa que aún con el amanecer mis ganas de vivir no renacerán. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario